La mala ficción de un buen narrador o mirá mirá, tengo internet, mirá mirá o desatormentándonos
- Estaba viendo en Internet aquellos dibujitos animados en Flash. Tú sabes. “Alejo y Valentina” creo que se llaman. Y me puse a pensar, a pensar un montón... Parecía que tal como iba todo solo podría encontrar en las cosas vacío y desazón...
- Así que la depresión nos agarró jodido.
- ...y salgo a la calle, decidido a gastar 45 soles y hacerme socio de Blokbuster sólo para poder sacar todas las temporadas de Nip/tuck y Seinfield. Porque según yo eso es lo que más necesito. Eso, o bastante marihuana y alcohol. Porque lo que uno quiere es llenar...
- “El vicio es un error de cálculo en el intento de alcanzar la felicidad”.
- ...pensaba en eso mientras me dirigía a Blokbuster. Eso, y que la vida es una gran interrogante. Y... Dios, sólo intentaba desatormentarme un poco. Me metí a una librería (¿Íbero?, ¿Crisol?, ¿El Virrey?) a preguntar si ya había llegado a Lima la traducción del último libro de Bret Easton Ellis, a lo que los encargados de atenderme me miraron con una gran cara de “y este quién es”, mientras vendían otro montón de libros caros de cocina. En Blokbuster no sabía si alquilar toda la temporada de Get smart o Nip/tuck. Fue la decisión más difícil del mes. De regreso a casa me puse a pensar en por qué me atormentaba tanto, si al final la mayoría de relaciones se resumen a sexo. Si lo último que quiero en mi vida es terminar como mis padres. Llegar a viejo y sentir que lo he arruinado. Que me casé con la persona equivocada. Todo en esta vida es un conjunto de momentos buenos y momentos malos. Odio admitirlo, pero no sé en qué momento la chica que más me gustaba se volvió una especie rara en extinción, lista para ser terminada. Abolida. Reemplazada. Tuve ganas de decirle un montón de cosas. Que en la revista Somos de hoy día salió en la portada una “chica chic” y un gran 2005: LO QUE PASÓ PASÓ que debería estar tatuado en mi frente. Hoy tuve ganas de seguir viendo aquellos dibujitos tan malos y tan simples, tan enfermos. Tan sin sentido. Algunas cosas todavía hacen que me acuerde de ella. Momentos que debieron haberse quedado en el olvido o que debieron recordarse por siempre (¿existe alguna diferencia?) y me pongo a pensar y a pensar y a pensar y a pensar. Lo que necesito, vaya, es desintoxicarme un poco. Es triste, pero lo que no vale la pena, no vale la pena. Y a veces lo mejor es desatormentarse.
- Vamos a ver Nip/tuck, vamos.
- Sí. Vamos a ver ALF, y la temporada entera de Seinfield.
- No, Seinfield no.
- Vamos a ver Nip/tuck.
- Estaba viendo en Internet aquellos dibujitos animados en Flash. Tú sabes. “Alejo y Valentina” creo que se llaman. Y me puse a pensar, a pensar un montón... Parecía que tal como iba todo solo podría encontrar en las cosas vacío y desazón...
- Así que la depresión nos agarró jodido.
- ...y salgo a la calle, decidido a gastar 45 soles y hacerme socio de Blokbuster sólo para poder sacar todas las temporadas de Nip/tuck y Seinfield. Porque según yo eso es lo que más necesito. Eso, o bastante marihuana y alcohol. Porque lo que uno quiere es llenar...
- “El vicio es un error de cálculo en el intento de alcanzar la felicidad”.
- ...pensaba en eso mientras me dirigía a Blokbuster. Eso, y que la vida es una gran interrogante. Y... Dios, sólo intentaba desatormentarme un poco. Me metí a una librería (¿Íbero?, ¿Crisol?, ¿El Virrey?) a preguntar si ya había llegado a Lima la traducción del último libro de Bret Easton Ellis, a lo que los encargados de atenderme me miraron con una gran cara de “y este quién es”, mientras vendían otro montón de libros caros de cocina. En Blokbuster no sabía si alquilar toda la temporada de Get smart o Nip/tuck. Fue la decisión más difícil del mes. De regreso a casa me puse a pensar en por qué me atormentaba tanto, si al final la mayoría de relaciones se resumen a sexo. Si lo último que quiero en mi vida es terminar como mis padres. Llegar a viejo y sentir que lo he arruinado. Que me casé con la persona equivocada. Todo en esta vida es un conjunto de momentos buenos y momentos malos. Odio admitirlo, pero no sé en qué momento la chica que más me gustaba se volvió una especie rara en extinción, lista para ser terminada. Abolida. Reemplazada. Tuve ganas de decirle un montón de cosas. Que en la revista Somos de hoy día salió en la portada una “chica chic” y un gran 2005: LO QUE PASÓ PASÓ que debería estar tatuado en mi frente. Hoy tuve ganas de seguir viendo aquellos dibujitos tan malos y tan simples, tan enfermos. Tan sin sentido. Algunas cosas todavía hacen que me acuerde de ella. Momentos que debieron haberse quedado en el olvido o que debieron recordarse por siempre (¿existe alguna diferencia?) y me pongo a pensar y a pensar y a pensar y a pensar. Lo que necesito, vaya, es desintoxicarme un poco. Es triste, pero lo que no vale la pena, no vale la pena. Y a veces lo mejor es desatormentarse.
- Vamos a ver Nip/tuck, vamos.
- Sí. Vamos a ver ALF, y la temporada entera de Seinfield.
- No, Seinfield no.
- Vamos a ver Nip/tuck.
<< Home